BALME

PROS:

- Adaptación al pié y comodidad desde el minuto uno.

- Relación calidad-precio excelente.

- Upper fabricado con materiales resistentes, que han soportado barro, rocas abrasivas y todo tipo de vegetación.

- Su suela Vibram Evlution nos ha dado mucha confianza en todo tipo de superficies y no muestra signos de desgaste prematuro.

- Calzado polivalente, ideal para salidas de un día o más, siempre que el peso no sea excesivo.


CONTRAS:

- Deberemos tener cuidado con la impermeabilidad de su membrana Ultrashell, ya que el agua acaba calando al cabo de varias horas de ruta en condiciones húmedas. 

- No incluye materiales reciclados en su fabricación.

Desde su fundación en 1964, dos de los pilares esenciales que han guiado a CimAlp en la creación de sus productos para la montaña y el outdoor han sido la accesibilidad y la durabilidad. Ello se traduce en productos con una buena relación calidad-precio y una construcción duradera. Las botas Balme representan un claro ejemplo de estos valores.

Se trata de unas botas que destacan por su simplicidad, sin grandes alardes tecnológicos ni innovaciones revolucionarias. Sin embargo, la combinación de diversos materiales, la suela Vibram Evolution y algunos pequeños detalles suman un conjunto muy equilibrado de cualidades simples que hacen de las Balme unas botas polivalentes y con buenas prestaciones, ideales para quienes buscan comodidad, durabilidad y eficacia sin necesidad de una gran especialización. 

Nosotros las hemos probado este otoño en diversos tipos de ruta y de terreno, y nos han permitido andar con confianza y seguridad tanto por senderos húmedos cubiertos de hojas (que esconden raíces y piedras!) como por terreno más seco y rocoso, desde el nivel del mar hasta los 2040 metros de altitud. Además, desde el primer paso sentimos una gran sensación de confort en nuestros pies, de modo que al poco rato ya nos habíamos olvidado que estábamos estrenando botas. 

En cuanto a gestión de la humedad, hemos notado un buen nivel de transpirabilidad y han mantenido nuestros pies secos en terrenos húmedos, aunque creemos que para terrenos o dias con mucha agua puede que no sean la bota ideal. 

En definitiva, en nuestra opinión las Balme son unas botas cómodas, eficaces y discretas que nos ofrecen fiabilidad suficiente para disfrutar nuestras excursiones por el bosque, rutas de media montaña o senderos costeros tipo "camí de ronda" o "camí de cavalls", ya sea en una sola jornada o en varias.

CimAlp cataloga las Balme como unas botas para "excursiones de un día con mochila de hasta 15 kg", es decir, para hiking de dificultad media-baja. Nosotros las hemos usado en rutas entre dos y nueve horas con mochila entre 4 y 12 kg. Hemos intentado que las rutas fueran variadas dentro del rango de montaña media y baja. Después de mes y medio de pateo, creemos que la comodidad y versatilidad de las Balme son suficientes para poder afrontar,  además de esas excursiones de un día, también rutas de varios dias sin ningún problema. 

Tal como hacemos habitualmente cuando se trata de testear calzado, empezamos con unas salidas de adaptación al lado de casa, en la zona del Montgrí -entre 0 y 300 metros de altura-, con senderos muy pedregosos, zonas de arena entre pinares y pendientes pronunciadas, aunque sin grandes desniveles. En estas primeras pruebas quedamos sorprendidos por la comodidad y agilidad que nos ofrecieron las CimAlp Balme. Ninguna rozadura, un buen agarre y una sensación de ligereza nos permiten afirmar que para actividades de este tipo, es decir, sin gran exigencia técnica ni mucho peso en la mochila, las Balme son una opción excelente. 

El siguiente paso fue afrontar una ruta más exigente para comprobar si respondían igual de bien. Emprendimos una ruta costera por la Costa Brava. Pendientes muy pronunciadas y un terreno muy abrupto, roto, pedregoso y seco fueron nuestro banco de pruebas en una jornada de siete horas.  Una vez más las CimAlp Balme nos transmitieron una gran confianza y nos permitieron disfrutar al máximo de la ruta. En ningún momento nos hicieron pensar en rozaduras ni golpes ni torceduras. Durante toda la ruta sentimos nuestros pies y tobillos cómodos y seguros, y además la suela Vibram Evolution agarra muy bien en ese terreno descompuesto y rocoso. Segunda prueba superada con nota. 

Seguimos aumentando la exigencia. Para la siguiente ruta nos desplazamos a la Alta Garrotxa para realizar una ruta muy húmeda, de 900 metros de desnivel positivo y llegando hasta los 1100 metros de altura. Debido a la lluvia de la noche y la llovizna casi constante durante toda la jornada, el terreno estaba muy mojado, con barro, pasos en roca mojada y vegetación que te iba duchando. Ahí las Balme siguieron mostrando las virtudes que ya hemos destacado en cuanto a ligereza, comodidad, protección de pies y tobillos y agarre. Sin embargo, también nos mostraron el único punto débil que les hemos encontrado. Al cabo de nueve horas de ruta en esas condiciones, nos descalzamos y vimos que teníamos los calcetines mojados. No lo habíamos ni notado, pero nos dimos cuenta que la impermeabilidad que ofrece la membrana Ultrashell puede que no sea suficiente para rutas en las que encontremos mucha agua. 

Finalmente quisimos subir un peldaño extra de exigencia, yendo un poco más allá del tipo de actividad que CimAlp propone para las Balme. Nos acercamos al pre-Pirineo del Ripollès para una ruta desde la aldea de Ogassa hasta el Puig Sestela, el Coma d'Olla y el Taga, con sus 2040 metros de altura. Nos salió una ruta de ocho horas muy variada. Pudimos probar las Balme en terreno de nuevo seco, pero con tramos de fuerte desnivel, con alguna trepada, con pendientes de hierba, con pedreras, ... Una vez más, las Balme nos ofrecieron una comodidad y una seguridad excelentes durante toda la jornada.

Así pues, después de mucho pateo, en nuestra opinión las CimAlp Balme son una excelente opción para rutas de uno o más dias, por terreno de montaña media-baja y mayoritariamente seco. La dificultad técnica creemos que puede llegar a un nivel medio-alto, siempre y cuando no tengamos que cargar mucho peso en la una mochila.

Tal como hemos comentado, las CimAlp Balme nos han ofrecido gran comodidad, estabilidad, sujeción, protección y agarre en diversos tipos de terreno, tanto en seco como en mojado. Si proponemos terreno seco o semi-seco es porque, tal como también hemos comentado, pudimos comprobar que en una jornada con bastante agua la impermeabilidad no fue del todo suficiente. 

Con estas prestaciones podemos atrevernos por terrenos bastante técnicos y exigentes sin temor a torceduras, golpes o resbalones. En nuestro caso nos hemos movido por senderos de tierra con rocas y raíces, caminos de gravilla, terreno descompuesto, roca, pendientes herbosas y canchales, todo ello tanto en llano como en fuerte pendiente; en todos estos terrenos hemos sentido siempre una pisada segura y estable. 

Obviamente, nunca debemos olvidar que cada terreno requiere su técnica de progresión y su grado de atención adecuado, y que está en nuestras manos movernos por la montaña con el conocimiento y las precauciones necesarias.

Tal como comentamos al principio, uno de los valores presentes en la trayectoria de CimAlp es la durabilidad. La marca francesa se aplica en conseguir productos durables, y no sólo para que sus usuarios los disfruten durante mucho tiempo, sino también con la idea lógica de que aumentar la vida útil de sus productos es la mejor manera de ser sostenibles.

Ya hemos destacado más arriba que la concepción de las Balme es simple, sin inventos, confiando en las soluciones que llevan años mostrando su eficacia y su robustez. Muestra de ello es la combinación de piezas de piel con otras de nylon reforzado para el upper, mientras un sólido bloque de TPU envuelve el talón para darle rigidez y resistencia.  

Por todo ello, creemos que las Balme nos van a acompañar durante muchísimos kilómetros, y más aún si no olvidamos los dos cuidados esenciales de mentenimiento que deberíamos tener siempre presentes: limpiarlas después de cada salida y secarlas a temperatura ambiente. 

En este apartado debemos recordar de nuevo que en CimAlp creen que un producto será más sostenible cuanto más duradero sea. 

Las Balme son unas botas que cumplen con esta lógica, aunque más allá de esto sólo podemos señalar un punto positivo, pero anecdótico, como es el uso de un 30% de espuma de origen biológico en la confección de la plantilla.

También es cierto que el hecho de ser Made in Europe limita las emisiones derivadas del transporte y garantiza que han sido fabricadas con unas condiciones laborables adecuadas.

Así pues, pensamos que CimAlp tiene aún, como tantas otras marcas, un largo camino por recorrer en este aspecto. Esperamos que se ponga manos a la obra cuanto antes.